Como despedir a un empleado: Recomendaciones para realizarlo profesionalmente

Como despedir a un empleado: La forma en que despidas a un empleado va a decir mucho de tu estilo a la hora de liderar. Ya que, despedir no es algo que te afecte sólo a ti y al trabajador que se va. Sino que, también, va a cambiar momentáneamente el proceso de trabajo dentro de tu equipo. Y, de alguna manera, hará que se cuestionen tu decisión y su propia seguridad a nivel laboral.

Por ello es recomendable que sigas las siguientes pautas:

Planificar el despido

Adoptada la decisión de despedir a un trabajador, todo el departamento de RR.HH debe ser conocedor de ello, a fin de agilizar los trámites para su salida de la empresa. También es recomendable preparar cuanto antes toda la documentación que se entregará al trabajador

Como despedir a un empleado

Contar con pruebas escritas

Para que el despido no tome por sorpresa al empleado, el jefe debe haber realizado distintos llamadas de atención, explicando al profesional que no está cumpliendo con su trabajo o informándole de que su nivel de desempeño no es el esperado. Para ello se debe contar con algunas amonestaciones o llamados de atención ya firmados por el empleado.

Mantener la calma

Aunque a menudo la relación entre jefe y empleado es buena, de confianza y distendida, el directivo tiene que tener presente que nunca ha pasado por un momento tan fuerte con esa persona y no sabe cómo va a reaccionar. Por tanto, debe mantener siempre la calma.

Confidencialidad

Otra de las cuestiones previas al despido es informar de lo que va a pasar sólo a las personas estrictamente necesarias y garantizar así la confidencialidad de la situación.

Ensaya

Es totalmente normal estar nervioso al encarar esta complicada conversación, por lo que te aconsejamos que ensayes. Repite lo que quieres decir e intenta anticipar las diferentes maneras en las que podría desarrollarse la conversación. Esto te permitirá reflexionar sobre cómo responder a diversas situaciones. 

El momento indicado

Aunque no existe una fecha, ni una hora clave para despedir a un empleado, se recomienda hacerlo un viernes al final del día, cuando ya se tenga todo el papeleo listo y la retroalimentación a la mano, para llevar a cabo un proceso objetivo.

Encuentra el lugar adecuado

Se trata de una conversación delicada y requiere un entorno adecuado. Encuentra un lugar tranquilo y privado donde puedas conectar con el empleado sin distracciones, interrupciones o a salvo de miradas curiosas.

Contar con testigos

La presencia de testigos en la reunión con el trabajador que se va a despedir es muy recomendable por varios motivos. La reacción del empleado al conocer la noticia es imprevisible y la presencia de más personas actúa como un elemento disuasorio en caso de mostrar una gran frustración.

Por otro lado, si el trabajador se negara a firmar la notificación del despido o alegara que la empresa no le ha comunicado debidamente los hechos que lo han motivado, los testigos podrían acreditar la celebración de la reunión y su contenido.

Ser preciso

Dile al empleado el propósito de la reunión en los primeros 30 segundos cuando entre a la habitación. Debes saber lo que vas a decir, y decirlo directamente. Con esperar para ir al punto o divagar sobre el tema, solo prolongas tu angustia y la del empleado.

Ofrece retroalimentación

Para despedir a un empleado de forma profesional, se debe ofrecer una retroalimentación, que le permita comprender por qué se considera que no cumplió con los objetivos del puesto que tenía designado. Esto también le será de gran ayuda para que pueda trabajar en sus áreas de oportunidad y colocarse nuevamente en el mercado laboral.

Dar pruebas al empleado en caso de que lo pida

Debes intentar que esta conversación sea lo más breve y directa posible. Sin embargo, es posible que el empleado te pida que le des detalles. En ese caso, debes tener preparados varios ejemplos en los que quede patente que su rendimiento no ha estado a la altura de lo que se esperaba de ella, antes que hablar de generalidades.

Ofrecer ayuda

Si hay una actitud especialmente bien valorada por los empleados cuando su empresa les despide es que se les brinde apoyo para encontrar un nuevo empleo. Tanto a nivel personal como a través de empresas especializadas en recolocar trabajadores.

Esta ayuda es especialmente valiosa para empleados que llevan muchos años en la compañía y la última vez que manejaron un curriculum ese documento se llamaba historial. A ellos, les vendrá de lujo la puesta al día en buscadores online, nuevas herramientas de reclutamiento, etc.

Evitar discusiones y agradecer los servicios prestados

Comunicado el despido, el trabajador puede hacer las preguntas que considere oportunas pero los representantes de la empresa no tienen por qué atender las cuestiones menos relevantes o las que ataquen directamente a la compañía.

Hay que evitar las discusiones porque el despido es definitivo y estas solo van a servir para tensar a las partes. Lo que no debe faltar es un agradecimiento formal al trabajador por los servicios prestados a la compañía.

Prepárate para la ira de los empleados

 Aunque esté claro que hayas hecho la diligencia adecuada, el empleado al cual despides se podría enfadar. Si se ponen violentos, llama a seguridad, a otros empleados o a la policía para que te ayuden a sacarlos. Si insultan o arremeten emocionalmente, haz lo posible por no responder. Posiblemente no lo merezcas, pero puede ser lo que necesiten para superar la situación.

La comunicación interna

Una vez que se ha dado el paso de despedir a un empleado y se ha informado al propio implicado es hora de comunicar la nueva situación al resto de la compañía. En este punto, al igual que en el resto del proceso, se deben evitar los titubeos y se ha de ser muy claro en el mensaje.

Conviene ser transparente estableciendo las causas del despido para que el resto del equipo sea consciente de cuáles son los errores que no hay que cometer, siempre teniendo en mente el respeto por la persona que abandona la empresa y sin ningún tipo de humillación hacia ella.

La decisión no es fácil, pero quizá el despido sea un mal necesario. Al final, lo importante es que los objetivos empresariales se cumplan. Rodéate del mejor talento, mejora tus filtros en el proceso de reclutamiento, motiva a tus colaboradores y asegúrate de que los despidos sean mínimos en tu compañía.